Unas imágenes aéreas mostraron una manada de más de 30 dugones (una especie de manatíes) frente a las costas de una isla tailandesa, sin duda a causa de la caída del turismo.
El sector turístico se ha colapsado en este país asiático a causa del nuevo coronavirus, y esa caída de visitantes en las playas ha traído un renacimiento de la vida silvestre.
Esta semana se informó de un número récord de nidos de tortugas laúd en las playas desiertas del país.
Las imágenes de drones publicadas por el centro de operaciones del Parque Nacional Marino muestran a una manada de dugones tomando sol bajo aguas cristalinas de color turquesa, frente a la costa de la isla del sur de Libong.
Estas criaturas marinas de movimientos lentos están clasificadas como especies vulnerables.
Tailandia no es un refugio seguro para la vida silvestre, ya que los desechos plásticos ahogan la vida marina y la contaminación del agua causada por el tráfico marítimo daña sus hábitats.
El año pasado, un bebé dugón huérfano fue encontrado varado en una playa en el sur de Tailandia. Pese a la lucha de conservacionistas para mantenerlo vivo, murió meses después de una infección agravada por trozos de basura en su estómago; lo que reanudó el debate público sobre la adicción al plástico de Tailandia.
Por: AFP