Lima, Perú 

El ciclón Yaku, que influyó en el incremento de lluvias y la declaración de «alerta roja» en Lima, ya se alejó de las costas peruanas y no representa un peligro para el país andino, confirmó este domingo el jefe del Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci), Carlos Yáñez.

El funcionario remarcó, en declaraciones publicadas en las redes sociales del Indeci, que el calentamiento del mar se mantiene y «hará que las lluvias se prolonguen hasta mayo» en el territorio peruano.

Recordó, en ese sentido, que la Comisión Multisectorial encargada del Estudio Nacional del Fenómeno El Niño (Enfen) «anunció que de continuar estas condiciones por tres meses, podría declararse (el fenómeno climático de) el Niño Costero«.

«Invitamos a las autoridades regionales y locales a que mantengan en sesión permanente a sus plataformas de Defensa Civil, tener sus almacenes abastecidos y preparar a la población ante las emergencias que todavía puedan presentarse», acotó.

Las fuertes precipitaciones que caen desde fines del año pasado en Perú se incrementaron durante la semana pasada con la aparición a unos 500 kilómetros de la costa peruana del ciclón Yaku, que dejó a su paso, al menos, ocho muertos en el norte y centro del país, además de grandes daños materiales, según datos oficiales.

Al respecto, el Centro de Operaciones de Emergencia Nacional (COEN) informó este domingo que el Indeci entregó del 10 al 17 de marzo un total de 231,53 toneladas de bienes de ayuda humanitaria a los gobiernos regionales de Tumbes, Piura, Lambayeque, Lima, La Libertad, Áncash y Cajamarca.

Esta ayuda llegó a un total de 15.230 personas afectadas por el impacto del ciclón y consistió en 75,96 toneladas para Piura, 43,14 para Cajamarca, 42,16 para Lima, 24,13 para Áncash, 20,17 para La Libertad, 19,18 para Lambayeque y 6,79 toneladas para Tumbes, detalló el informe.

A pesar del alejamiento del ciclón, el Gobierno peruano declaró este domingo el estado de emergencia durante 60 días en 154 distritos de 8 regiones afectadas por las lluvias que han causado en total la muerte de, al menos, 50 personas, además de 8.000 damnificados, más de 50.000 afectados, 1.300 casas destruidas y 640 kilómetros de carreteras afectadas.

Al ofrecer este reporte, el pasado viernes, la presidenta Dina Boluarte añadió que, hasta el día martes, las lluvias también dejaron 1.800 casas inhabitables, 300 kilómetros de canales de riego afectados, 111 puentes destruidos y 48 kilómetros de redes de agua afectados.

Asimismo, las inundaciones y deslizamientos de lodo por las lluvias han causado la destrucción de 55 aulas escolares y de cuatro establecimientos de salud, además de 11.000 hectáreas de cultivos y la muerte de 28.000 animales de ganaderos.

El jefe del Indeci señaló que este domingo y lunes disminuirá la intensidad de las lluvias y consideró que esta será una «oportunidad para que las autoridades fortalezcan la preparación» de sus localidades ante el pronóstico de que estas volverán a incrementarse durante los siguientes días.