Científicos de más de veinte instituciones han propuesto una serie de directrices para prevenir la demencia, una iniciativa liderado por la Universidad de Ginebra (UNIGE) y los Hospitales Universitarios de Ginebra (HUG), en la que participa Barcelonaβeta Brain Research Center (BBRC), centro de investigación de la Fundación Pasqual Maragall.

La realidad actual del alzhéimer

Con 10 millones de personas afectadas en Europa, el alzhéimer es la enfermedad neurodegenerativa más frecuente y conlleva una pérdida drástica de autonomía para las personas afectadas y un gran impacto en los costes sanitarios. Por este motivo, su prevención se ha convertido en un auténtico reto social.

El doctor Orio Grau, responsable del Grupo de Investigación Clínica y en Factores de Riesgo por Enfermedades Neurodegenerativas del BBRC y uno de los autores del trabajo afirma que los protocolos de prevención a gran escala sobre las mejoras en estilos de vida, como la actividad física, la atención a la nutrición, o la prevención cardiovascular, han reducido el riesgo de desarrollar la enfermedad de alzhéimer o formas relacionadas.

“Sin embargo, la prevalencia de la demencia continúa aumentando con el envejecimiento de la población y se estima que el número de personas con alzhéimer en Europa se duplicará en el año 2050”, asegura el experto.

Los “Servicios de Salud Cerebral”

En este contexto, los colaboradores del proyecto han desarrollado un nuevo protocolo preventivo que apuesta por ofrecer servicios innovadores de salud cerebral.

En las directrices recogidas, el grupo investigador ha identificado cuatro pilares de este nuevo enfoque:

  • Evaluación del riesgo
  • Comunicación de riesgos
  • Prevención personalizada
  • Mejora cognitiva

“La enfermedad de alzhéimer se empieza a desarrollar mucho antes del inicio de los síntomas; por lo tanto, las estrategias destinadas a la prevención son cruciales”, señala Grau.

Los cuatro pilares antes mencionados permitirán que los Servicios de Salud Cerebral, clínicas de memoria de segunda generación, lleguen al segmento de población de la que la memoria aún funciona bien y que desean preservarla o mejorarla.

Una propuesta innovadora para prevenir la demencia

El objetivo último del protocolo es poder dar soporte e información individualizada a personas con quejas de memoria subjetiva, pero sin alteraciones objetivas en test que evalúan su rendimiento cognitivo, similarmente al actual protocolo de gestión del riesgo de las enfermedades cardiovasculares.

¿Cómo funciona?

En este sentido, el procedimiento establecido por el grupo investigador Barcelonaβeta Brain Research Center tiene en cuenta factores de riesgo de la enfermedad de alzhéimer o trastornos relacionados:

  • Con la genética, como el gen APOE4.
  • Con el estilo de vida , como el consumo de alcohol, el aislamiento social, la obesidad.
  • Con las condiciones del propio individuo, como la hipertensión, la diabetes, la pérdida auditiva, la depresión o el traumatismo craneal.

A partir de esta información, se establece un índice de riesgo que se comunica de manera precisa y comprensible al paciente siguiendo una serie de recomendaciones basadas en su personalidad y los antecedentes.

Finalmente, se estudian intervenciones farmacológicas y no farmacológicas para reducir estos riesgos y se brindan métodos de refuerzo o estimulación de la memoria basados en ejercicios, juegos y/o estimulación eléctrica o magnética transcraneal.