Investigan dispositivos ópticos para estudiar cultivos de caña en Colombia

Colombia.

Uno de los grandes retos que tiene la agricultura en la actualidad es poder conciliar la preservación futura de la biodiversidad con el progreso humano, sobre todo en un país como Colombia, donde muchos investigadores trabajan por lograr el equilibrio entre la sostenibilidad y la producción agrícola.

En efecto, es vital la obtención de información detallada que dé cuenta sobre el estado nutricional de un cultivo, en este caso la caña de azúcar, permitiendo así que el agricultor tome decisiones oportunas ante cualquier situación de riesgo.

Hoy en día, el método más recurrente para obtener ese diagnóstico preventivo son las imágenes satelitales. Sin embargo, carecen de resolución espacial, espectral y temporal, lo que hace difícil conocer el estado particular de la planta. Es aquí donde la Universidad del Valle, en conjunto con otras instituciones, optan por investigar e implementar distintos métodos ópticos sobre los cultivos, para dar paso a la agricultura de vanguardia.

“La agricultura prescriptiva hace parte de una tendencia actual, donde se quieren aprovechar tecnologías emergentes, desde la toma de datos digitales, utilizarlos para hacer análisis descriptivos, diagnósticos, modelos de predicción, hasta llegar a poder, a partir de toda esa información, dar soluciones o encontrar las mejores soluciones en el momento oportuno, para que faciliten la toma de decisiones de las prácticas agrícolas que se necesitan para el manejo del cultivo”, dijo Aldemar Reyes, docente investigador de la Universidad del Valle.

Gracias a la labor de académicos y profesionales podemos obtener grandes cantidades de información espectral en poco tiempo y eficientemente, lo que finalmente servirá para tomar medidas correctivas y preventivas del manejo, en cuanto al estado de un cultivo de caña de azúcar, implementando así un sistema de agricultura de cuarta generación.

“La Universidad del Valle tiene como misión no solamente educar aquí dentro de las aulas de las instalaciones de la universidad, sino también hacer transferencia de ese conocimiento que se genera aquí en pro del desarrollo de la región, no solamente de unas pocas personas. Y para nosotros es enriquecedor, porque también nos permite acercarnos a los problemas reales que se tienen en el entorno. Salir de los laboratorios para nosotros es importante y formar personas que después vayan y se incorporen a las actividades económicas del lugar de la región para poder mejorar ese tipo de cosas”, explicó Carlos Galíndez, profesor de la Universidad del Valle.

“Ese engranaje es importantísimo, es el engranaje de la academia con la parte comercial. Eso nos va a impulsar como región o va impulsar como país”, comentó Fernando Muñoz, edafólogo. Este tipo de tecnologías es muy importante que llegue a la agricultura de pequeña escala, para que también estos sistemas productivos agrícolas sean sostenibles y competitivos.

Por: Univalle.