Francia.

Adiós a los tradicionales billetes (boletos) de cartón del metro de París. Después de 120 años, el metro de la capital francesa se embarca en un futuro totalmente sin contacto. Dejando atrás los icónicos boletos rectangulares.

El plan de la empresa gestora del sistema de venta preveía acabar con su comercialización en el primer trimestre de 2022. Pero esto cambió por la pandemia y la guerra en Ucrania, que provocaron la escasez mundial de microchips necesarios para fabricar las tarjetas inteligentes que los reemplazarán.

Ahora se estima que los cartones desaparecerán en 2023, mientras la empresa promueve el cambio de hábitos y redujo la cantidad de estaciones que los venden. “A mí todo lo que no sea papel me va perfecto. No me gusta el papel”; dijo el turista, Javier Romani.

“Es una forma de progreso. Pero yo soy un poco arcaico. Me gustan las cosas tradicionales y quiérase o no, el billete termina siendo también un recuerdo del viaje. Vengo a París desde hace 20 años y siempre guardo algunos de mis billetes de metro y me gustaría que se mantuviera”, comentó el turista, Jarbas Luis.

Más allá de su uso inicial, estos tickets han inspirado a artistas, cineastas y cantantes, han servido como marcapáginas y hasta como símbolo de resistencia.

“Durante la ocupación, el billete de metro fue secuestrado en varias ocasiones, en particular cuando el general de goldes de Londres a través de la BBC convocó a jornadas de resistencia a la ocupación alemana.

A algunas personas se les ocurrió la buena idea de tomar sus billetes de metro usados y cortarlos en forma de cruz de Lorena y hacer un montón de pequeños confetis de cruz de Lorena. Y luego los arrojaban en los andenes. Fue un signo de resistencia pasiva”, destacó el autor, Gregorie Thonnat.

La modernización en París se produce 20 años después que Nueva York suprimiera sus fichas metálicas y luego de más de una década desde que el metro de Londres pasará a funcionar mayoritariamente sin papel.