El sector musical incrementó sus ingresos en un 10,2% en todo el mundo el año pasado, hasta totalizar 28.600 millones de dólares, y América Latina fue una de las regiones que más creció, casi un 20%, según cifras publicadas el jueves.

La artista más exitosa fue (sin sorpresas) la estadounidense Taylor Swift, según el informe anual de la Federación Internacional de la Industria Fonográfica, que representa a las grandes compañías discográficas.

Detrás de Swift aparecen dos bandas coreanas, Seventeen y Stray Kids, lo que refleja el gran auge del K-Pop.

Las canciones más vendidas fueron «Flowers» de Miley Cyrus, la única canción que superó 2.000 millones de reproducciones (2.700 más exactamente), seguida de «Calm Down» de Rema y Selena Gomez (1.890 millones) y «Kill Bill» de Sza (1.840 millones).

La industria musical creció por noveno año consecutivo, gracias en gran parte al crecimiento de la música en continuo («streaming», 11,2%), que ya representa más de dos tercios (67,3%) de los ingresos globales.

Las suscripciones de streaming pagado superaron los 500 millones por primera vez, hasta alcanzar los 667 millones.

Los formatos físicos, especialmente el vinilo, también experimentaron un crecimiento, con un aumento del 13,4% de las ventas.

«Las cifras en el informe de este año reflejan una industria verdaderamente global y diversa, con crecimiento de ingresos en cada mercado, cada región y en prácticamente todos los formatos de música grabada», dijo John Nolan, director financiero de la IFPI.

Las regiones de mayor crecimiento fueron África subsahariana (un 24,7%) y América Latina (un 19,4%), gracias a la difusión del streaming y al surgimiento de estrellas locales como Burna Boy, Asake, J Balvin y Bad Bunny.

Los mayores mercados musicales siguieron siendo Estados Unidos, Japón y Gran Bretaña.

Sin embargo, la industria enfrenta varios desafíos, especialmente a medida que los jóvenes pasan más tiempo en TikTok y jugando en línea.

«Las plataformas de video de clips cortos con publicidad no tienen posibilidad de generar suscripciones de pago» advirtió Dennis Kooker, de Sony Music, en una conferencia de prensa para lanzar el informe de la IFPI.

Y esas herramientas al mismo tiempo «se están convirtiendo en las plataformas de consumo primarias para muchos consumidores jóvenes», añadió.

Universal Music Group recientemente retiró su música de TikTok por divergencias sobre la música generada por inteligencia artificial y los derechos de autor de las canciones.

Las discográficas están cada vez más centradas en los superfanáticos, explicó Kooker.

«Aquellos que quieren más, y están dispuestos a pagar más, necesitan productos diseñados específicamente para ellos», dijo.

Pero las empresas no logran convencer al público para que pague por el streaming.