México.
El dióxido de carbono, mejor conocido como CO2, es un gas tóxico producto de la combustión y su aumento en la atmósfera es consecuencia de las actividades humanas en el planeta.
¿Qué actividades generan el CO2? El uso del automóvil, del transporte público, encender la licuadora o la televisión requiere energía que por lo general proviene de la quema de combustibles fósiles que generan CO2.
Las excesivas emisiones de este gas son una de las principales causas de los cambios climáticos que se han observado a mayor escala en tiempos recientes. Climas más calurosos o más fríos son evidencia de dicho cambio.
Se han propuesto varias alternativas para controlar la concentración de este gas en la atmósfera. Los programas de verificación vehicular son una de estas medidas, plantar más árboles que lo absorban, cambiar a un estilo de vida con baja huella de carbono o incluso se ha propuesto su almacenamiento subterráneo.
Sin embargo, en los últimos 15 años los científicos están analizando y desarrollando otras alternativas, como la conversión de CO2 en productos químicos de valor añadido, como etanol, metanol y ácido fórmico.
¿Pero para qué sirven estos compuestos? Por ejemplo, el metanol es un alcohol que es la base para producir solventes como el ácido acético vinagre. También se puede utilizar como combustible para generar electricidad o como materia prima en procesos industriales, por lo que desarrollar e implementar este tipo de procesos permitirá disminuir nuestro impacto en el cambio climático del planeta.
Por: UAEH.
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