India.

Una niña sufre asma, los médicos apuntan a que el origen está en la contaminación del aire que respira. El tratamiento será caro. “Vamos a ingresarla para empezar con el tratamiento. Luego comprobaremos si tiene tuberculosis”, dijo la doctora Sana Salim. La doctora Sana Salim es responsable de cientos de pacientes con problemas respiratorios.

«La sala está llena. Esta semana hemos tenido muchos casos, es una condición realmente peligrosa para los recién nacidos y también para los niños desnutridos. Creo que se podría considerar como emergencia médica. Debemos intervenir cuanto antes», advirtió.

Los hospitales de la capital india confirman que el número de pacientes se ha duplicado esta semana. Es la época del año en que el aire de Nueva Delhi se vuelve tóxico, coincide con la llegada del invierno.

Gran parte de la contaminación procede de la propia ciudad: del tráfico y también de la quema agrícola. Los agricultores de las afueras de Delhi queman los restos de paja tras la cosecha.

Las autoridades municipales han pedido a la población que se quede en sus casas. Han paralizado las obras de construcción y las escuelas están cerradas.

Las nuevas normas también prohíben los fuegos artificiales, pero ni siquiera la sentencia del Tribunal Supremo ha podido impedir que la gente disfrute de igual y como siempre.

“Sí, estoy de acuerdo en que contribuye a la contaminación, pero es imposible de evitar, forma parte del rito. Siempre lo hemos celebrado así, no se puede cambiar así como así. Hay más cosas que contribuyen a la contaminación, este no es el único factor”, dijo un ciudadano.

Así se ve Delhi después de Diwali, los niveles de contaminación son varias veces superiores al límite de seguridad y quien vive aquí no puede escapar de ninguna manera de la contaminación.

Los niños trabajan en la calle como recicladores son los más vulnerables al aire tóxico, una comunidad desesperada que mantiene limpia la ciudad. Hoy un equipo de la ONG, CHETNA, visita la barriada para informar a los niños sobre la polución del aire y repartir mascarillas.

“Los niños que viven aquí se encuentran en una situación muy difícil. El objetivo es protegerlos y como se puede ver no están en un entorno que pueda permitirse purificadores de aire o máquinas que ayuden a tener un ambiente saludable en sus hogares”, dijo una portavoz de CHETNA.

Los expertos sanitarios denuncian que hasta que no se trate la contaminación atmosférica como emergencia, millones de personas seguirán poniendo en riesgo su salud con solo respirar.