Alemania.
La pandemia de COVID-19 parece muy lejana, pero el virus sigue entre nosotros. ¿Cuál será la próxima pandemia?, ¿cómo podemos estar preparados para afrontarla con mayor eficacia? Actualmente, gracias a un proyecto europeo, dos centros trabajan para encontrar una respuesta a todas estas preguntas.
Estos institutos de investigación ubicados en Múnich y Habsburgo en Alemania emplean tecnología de punta con el objetivo de entender cómo funcionan los virus.
“La próxima pandemia llegará, seguro, y lo más probable es que sea otra que se propague por transmisión aérea. Y lo que ahora intentamos establecer son centinelas también para entender cómo se dispersan las partículas de virus en el ambiente, en los aviones, en los autobuses. Así que, en la próxima pandemia no queremos que la vida se apague. Debe continuar”, dijo Claudia Trail-Hoffmann, directora del Instituto de Medicina Ambiental.
La COVID-19 ha causado más de 6.9 millones de muertes e infectado a más de 771 millones de personas en todo el mundo, según la Organización Mundial de la Salud.
El Instituto de Medicina Ambiental del Centro Helmholtz de Múnich ha adquirido equipos de alta tecnología gracias al proyecto europeo PerForM-REACT. Su principal objetivo es la detección precoz del avance de la enfermedad.
“Hay ciertos grupos de virus como los del coronavirus o los flavivirus que están sometidos a una vigilancia muy estricta y ahora disponemos de las herramientas y de las plataformas de comunicación para estar mejor preparados y ser conscientes de las señales de alerta que puedan sonar”, Gregor Ebert, líder del grupo BSL-3 en Helmholtz Múnich.
En Múnich las instalaciones cuentan con un laboratorio de bioseguridad de nivel 3, con cerraduras de entrada selladas, salas de presión negativa, un sistema térmico de inactivación de virus, así como otros instrumentos como los microscopios que se utiliza para estudiar los virus a nivel molecular.
“Estamos estudiando si el SARS-CoV-2 puede infectar diferentes tipos de células y diferentes partes de estos modelos de sistemas celulares en 3D”, dijo Dan Kaemena investigador del Instituto de Virología de Helmholtz en Múnich.
El equipo de Múnich comparte los resultados de su investigación con el laboratorio de la Universidad Clínica de Habsburgo asociada al proyecto. Allí estudian las interacciones entre distintos virus, el efecto del cambio climático, el polen y la contaminación en su propagación.
El presupuesto total de este proyecto, que abarca los dos estudios, es de 18,5 millones de euros. PerForM-REACT ha sido financiado íntegramente por la política de cohesión de la Unión Europea. La investigación avanza cada día, Corina está trabajando con un robot que puede predecir si una infección será grave o no, incluso en un paciente positivo, pero asintomático.
“Con un poco de suerte, en el futuro, si das positivo a un test con esta pruebas predictivas podrían enviarte a un médico de inmediato o al hospital para que te monitoricen y, con un poco de suerte, prevenir una evolución grave ”, dijo Corina Holetschech del Instituto de Medicina Ambiental.
- ECOMARE: el proyecto que cuida la biodiversidad marina - enero 29, 2024
- El mayor iceberg del mundo se mueve tras más de 30 años encallado - enero 29, 2024
- El primer dron de pasajeros para uso médico, vuela sobre la Unión Europea - enero 29, 2024