Guadajalara, Jalisco.
En un encuentro para reflexionar sobre el cambio de dinámicas y narrativas en distintos ámbitos de la comunicación, expertos hablaron sobre cómo ha cambiado la industria audiovisual con la interacción con la Inteligencia Artificial en el panel “Cuando la ficción es más poderosa que la realidad” en #tvmorfosis: “Más allá de la inteligencia artificial”.
La periodista Sonia Serrano, el cineasta y académico Armando Casas, y el caricaturista Saúl Hernández o mejor conocido como Qucho, hablaron de cómo integran el uso de la tecnología en su quehacer profesional.
“En un contexto violento como en el que vivimos la ficción supera la realidad y en el periodismo yo creo que cuando hablamos de herramientas pueden ser un vehículo para potenciar este trabajo sin renunciar a la narrativa de los hechos apegados a la realidad”, dijo Serrano.
En relación a la industria cinematográfica, Casas explicó que la inteligencia artificial aún es un tema complejo de comprender, pues “se preocupan por cosas que tienen que ver con los derechos de autor, pero al mismo tiempo nos está dando tiempo para hacer otras cosas, como la oportunidad de ayudar a la creatividad audiovisual optimizando tareas sin meternos en problemas”.
Por su parte, Qucho explicó que el surgimiento de esta tecnología le preocupó en un principio. “Pensé que me iba a quedar sin chamba. He visto piezas elaboradas con inteligencia artificial que posiblemente a mí me costarían hasta dos semanas para hacer una igual y a la máquina le tomó quizá menos tiempo, pero ahora las veo como una herramienta”.
Asimismo, comentó que su preocupación se aminoró cuando reflexionó sobre la forma de circular que han tenido sus obras, pues estas se han desarrollado en gran medida en la red y en formatos digitales.
Por otro lado, Sonia comentó que su profesión es privilegiada, ya que al integrar herramientas digitales a su trabajo le ha permitido agilizar procesos como las transcripciones, las búsquedas de información, bases de datos o las solicitudes de transparencia; pero hace énfasis en la idea de que la máquina no puede reemplazar las capacidades humanas porque estas “no saben hacer interpretaciones, no pueden darle un tratamiento sensible a un tema de desapariciones”.
En esta misma línea, invitó a los usuarios a ser críticos con el uso de la tecnología y a usarla a beneficio de sus profesiones porque “no hay manera de que la inteligencia artificial cuente historias o se acerque a las personas. No hay manera de que pueda remplazar el lugar de los humanos para realizar nuestro trabajo”.
“En el cine podemos hacer pruebas para guiones, limpiar audio e imagen con más rapidez, pero tenemos claro que la inteligencia artificial no puede dirigir la película. Y sí, es probable que se pierdan trabajos, pero se abran nuevos espacios que vayan orientados a la tecnología”, agregó Casas.
La situación a tratar apunta a la ética, la regulación y a que exista un conocimiento sobre los alcances de la tecnología para saber qué rumbo hay que darle. “No va a quitarnos el trabajo, pero si va a quitárselo a quien no la quiera usar y en la medida en que utilicemos la herramienta con ética no habrá problema”, dijo Sonia.
“Estamos viendo una revolución con la inteligencia artificial a nivel global y siendo críticos hay que ver qué nos permite hacer. Esencialmente es una herramienta valiosa que nos ayuda a optimizar el trabajo”, concluyó.
Por: Denisse Godínez / NCC Iberoamérica
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