Estados Unidos.

La NASA se unió oficialmente a la búsqueda de OVNIS. La Agencia espacial estadounidense designó a una persona para dirigir el nuevo programa encargado de rastrear misteriosos objetos voladores, pero no hizo público su nombre.

“En la NASA nos tomamos muy en serio la inviolabilidad del proceso científico y la seguridad y protección de nuestro equipo. Esa es en parte la razón por la que no estamos divulgando el nombre de quién ocupará la dirección, porque la ciencia tiene que ser libre, tiene que someterse a un proceso real, riguroso y racional, y para ello es necesaria la libertad de pensamiento. Algunas de las amenazas y el acoso han sobrepasado los límites, francamente”, explicó Daniel Evans, administrador adjunto de investigación de la NASA.

El nombramiento es el resultado de una investigación independiente sobre este tema, dirigida por un grupo de eminentes científicos y expertos aeronáuticos. Su informe recomienda que la NASA desempeñe un papel de liderazgo en un esfuerzo gubernamental serio y riguroso para comprender estos fenómenos.

“En primer lugar, examinar cómo la NASA puede utilizar nuestra experiencia e instrumentos para estudiar estos fenómenos desde una perspectiva científica. En segundo lugar, cambiar la conversación sobre estos fenómenos del sensacionalismo a la ciencia y asegurarnos de que ante cualquier cosa que encontremos o cualquier cosa que recomendemos, nos aseguremos de que esa información se comparta de forma transparente en todo el mundo”, declaró en una conferencia de prensa el director de la agencia, Bill Nelson.

La NASA está en buena posición para desempeñar un papel destacado gracias a sus capacidades satelitales y otros activos técnicos. Pero la agencia subrayó que cualquier hallazgo de posible origen extraterrestre debe ser la hipótesis de último recurso, la respuesta a la que se recurre sólo después de descartar todas las demás posibilidades.

Décadas de películas y libros de ciencia ficción sobre extraterrestres han hecho que gran parte del público se ría del tema, lo que explica en parte la decisión de la agencia de no revelar la identidad de los responsables del nuevo programa.