Perú.

¿Cómo afectó el cambio climático a las civilizaciones antiguas? Es parte de lo que pretende descubrir la arqueóloga peruana Ruth Shady, quien encabeza una expedición en las ruinas de Vichama, donde los grabados en los muros representan el anuncio de la llegada del agua luego de una devastadora sequía, según las investigaciones.

Tenemos evidencias de lo que el cambio climático significó para la sociedad humana y también para la naturaleza. Porque los valles fueron convertidos en oasis, en desiertos arenosos, los ríos desaparecieron”, destacó Ruth Shady.

Vichama es uno de los 12 centros urbanos que conforman el complejo arqueológico de 5000 años que Shady descubrió a finales del siglo pasado. La científica rebautizó como Caral a lo que se conocía como chupa cigarro, una meseta árida escoltada por cerros y un río cercano que la separa de valles fértiles. Aquí encontró pirámides con cabeza achatada y una sorprendente arquitectura antisísmica.

Shady ha dedicado buena parte de su vida a excavar y proteger este sitio arqueológico, a pesar de las amenazas que ha recibido.

“Varios sitios arqueológicos han invadido traficantes de tierras y después llamaron al abogado que nosotros tenemos y le dijeron sigue protegiendo a esa mujer y te vamos a enterrar junto con ella cinco metros debajo del suelo”, explicó Ruth Shady.

Shady lamenta el mínimo apoyo de las autoridades, tanto para su seguridad como en términos de presupuesto. Denuncia que el Estado peruano destina 0,12% del Producto Interno Bruto a la investigación.

Se la ve solo desde un aspecto turístico, pero no se valora el conocimiento científico que se recupera con la investigación arqueológica. Lamentablemente. Y que es necesario que se conozca para un desarrollo integral y sostenible en nuestro país”, manifestó Ruth Shady.

Caral, que forma parte del Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, fue reconocida como la civilización más remota de América y una de las más antiguas del mundo, junto a las de Mesopotamia, Egipto, China, India y Creta.