Iberoamérica. 

Seguramente hoy desayunaste uno, dos o hasta tres huevos. Este alimento es parte fundamental de la dieta del ser humano y lo ha sido prácticamente desde que habitamos este planeta.

Además de ser un elemento central de nuestra canasta básica para los mexicanos, este objeto de cuerpo redondo u ovalado y dureza variable también es recurrente en nuestra vida cotidiana y lo utilizamos incluso dentro de nuestro lenguaje coloquial.

Por ejemplo, cuando queremos decir que alguien es muy perezoso o cuando afirmamos que algo salió muy bien.

Diferentes tipos de especies nacen de un huevo. Quizá uno de los que más relacionamos es la gallina, pero también la codorniz, el pato y el avestruz, entre muchísimos otros animales. Huevos revueltos, estrellados, divorciados, rancheros, omelet… La variedad en la preparación de este alimento es una de las razones por las cuales en la despensa difícilmente faltará un kilo de huevo.

Por: TV UNAM.