Iberoamérica.

La caza de extraterrestres microscópicos. El flamante laboratorio, el laboratorio de Astrobiología del observatorio de Arcetri, está a la vanguardia de uno de los sectores más fascinantes de la astronomía.

Simulación de las condiciones presentes en discos protoplanetarios, estudio de asteroides, proyectos que involucran las lunas heladas de Júpiter y Saturno. Sobre todo: entender qué rastros podrían dejar cualquier forma de vida microbiana en el Planeta Rojo.

“Utilizamos materiales similares a los que se pueden encontrar en Marte, por ejemplo, y tratamos de mezclar biomoléculas que son precisamente los indicadores de la posible presencia de vida en otras partes del espacio con minerales. Proporcionamos estas muestras que preparamos a los equipos que han desarrollado los instrumentos que están a bordo de los rovers para comparar los resultados de laboratorio con los resultados que vienen de Marte. De esta forma tratamos de entender si el material que hemos preparado también se puede encontrar en la superficie marciana”, dijo John Brucato del Laboratorio de Astrobiología INAF Observatorio Astrofísico Arcetri.

Información útil para interpretar los datos enviados por los robots exploradores. Incluso el más avanzado, el Perseverance de la NASA, está trabajando con el apoyo de investigadores florentinos del INAF. “Recientemente celebramos dos años en Marte. Han sido dos años muy interesantes en los que el rover ha explorado el cráter Jézero que es el lugar donde antiguamente había un lago de agua líquida”, destacó Teresa Fornaro del Laboratorio de Astrobiología INAF Observatorio Astrofísico Arcetri. 

En unos años, las muestras recolectadas serán traídas a la Tierra por una misión compleja en la que participarán la NASA y la ESA. Probablemente será un gran avance.

“Es muy importante traer las muestras marcianas a la Tierra porque los instrumentos que podemos poner en un rover están miniaturizados y tienen una potencia y sensibilidad significativamente más bajas que los instrumentos que están disponibles en nuestros laboratorios terrestres. Esperamos encontrar materia orgánica que sea el remanente de un organismo vivo. Estamos hablando de organismos unicelulares muy simples, porque las condiciones en Marte favorables para el desarrollo de la vida tal como la conocemos no duraron mucho», mencionó.

Sin embargo, es posible que la vida microbiana haya evolucionado porque los primeros organismos unicelulares se desarrollaron en la Tierra precisamente en el mismo período en el que Marte tenía condiciones muy favorables y, por lo tanto, se espera que esto también fuera posible en Marte y luego organismos se extinguieron debido al cambio en las condiciones marcianas o podrían haber sobrevivido en los nichos aún habitables presentes en el subsuelo, donde, por ejemplo, la radiación no puede penetrar o donde todavía es posible tener agua líquida. 

En cambio, la misión que podría darnos información sobre el subsuelo es el ExoMars de la ESA, con un rover equipado con un taladro capaz de descender hasta dos metros de profundidad. De nuevo, Arcetri está en primera línea. El lanzamiento, pospuesto varias veces por diversas razones, podría tener lugar en 2028.

“En este laboratorio simulamos condiciones que pueden estar presentes en el espacio con el objetivo de buscar señales de vida”, concluyó John Brucato Laboratorio de Astrobiología INAF Observatorio Astrofísico Arcetri. 

Por: RAI.