La ancestral tradición de los huevos de Pascua en Rumanía

Rumanía.

El Museo Satului, situado en Bucarest, Rumanía, es uno de los primeros museos etnográficos al aire libre del mundo. Expone más de 340 casas, hogares de pueblos históricos de diferentes regiones del país.

Allí se puede ver a artesanos rumanos, especializados en artesanía tradicional, pintar los típicos huevos de pascua.

“En Rumanía, pintar y decorar huevos de Pascua es un arte tradicional. Hay símbolos y colores específicos utilizados por los artesanos, que tienen diferentes significados. Refieren a la vida, la naturaleza o la eternidad. La decoración de los huevos de Pascua tiene un poderoso simbolismo y se hace a mano por experimentados artistas”, explicó la artesana Cristina Niga.

La comida tradicional de Pascua en Rumanía se basa en los huevos duros, pintados y decorados con colores vivos, pero también en un pastel tradicional llamado «pasca», un pan dulce relleno de queso. Otra comida típica es el «cozonac», un panettone tradicional rumano, que suele hornearse tres días antes de Pascua.

“En la cesta de Pascua se coloca la torta de Pasca, que es muy importante, también se pone un huevo, un trozo de tocino, cebollas verdes, ajos, un vasito de sal, una moneda, para atraer la suerte y una salchicha, todo lo que tengamos en nuestra casa, para que sea bendecido. Ya en la iglesia, tanto los niños como los ancianos se alegran disfrutan de las ofrendas de la cesta”, detalló Cristina Niga.

En Rumanía, los días previos a la Pascua son la Semana Santa. Según la tradición, el viernes la gente ayuna, algunos sin comer ni beber. Estos días se consideran una oportunidad para que los creyentes se reconcilien con sus semejantes.