Berlín.

Las autoridades de Brandeburgo, el «Land» que rodea Berlín, han alertado sobre la muerte masiva de peces detectada en el río Oder, fronterizo con Polonia, al parecer atribuida a la contaminación de sus aguas unida a la sequía.

Según informaciones de la televisión pública regional Rbb, en los análisis realizados en las aguas del río se ha identificado la presencia de una alta concentración de mercurio, probablemente procedente de vertidos industriales.

Las autoridades regionales advirtieron ya ayer de una posible catástrofe medioambiental, tras haberse detectado desde hace días la presencia masiva de peces muertos, lo que en la situación actual, con el nivel del río muy por debajo de lo habitual, es especialmente visible.

Por parte polaca se ha informado de diez toneladas de peces muertos, según el mencionado canal público alemán. La alerta medioambiental en ese río fronterizo con Polonia se suma a la situación de alarma sobre los principales ríos del país, especialmente el Rin, derivada de la sequía que sufre todo el país.

Ello afecta al transporte fluvial por ese río, principalmente de carbón y mercancías industriales, que ha tenido que restringirse a mínimos en los últimos días y que se teme deba interrumpirse completamente a lo largo del próximo fin de semana.

El nivel del Rin a la altura de Kaub, en el «Land» de Renania Palatinado, estaba este viernes en 42 centímetros, cinco menos que el día anterior, y se espera que baje a 40 antes del sábado.

Ese punto se considera de la máxima trascendencia para el conjunto del tráfico fluvial en el Rin. Desde hace semanas, las autoridades alemanas vigilan la situación y han alertado de la necesidad de reducir la carga de las barcazas de transporte.

Ello convierte en económicamente deficitarios estos transportes, que en parte han sido desviados a la red viaria y ferroviaria.