México.

El queratocono es una patología degenerativa de la córnea que cada vez se está presentando más entre la población. Así lo destacó el doctor Luis Fernando Barba Gallardo, profesor investigador del Departamento de Optometría de la Benemérita Universidad Autónoma de Aguascalientes, quien dijo que hace diez años se presentaba un caso por cada dos mil pacientes. Sin embargo, en la actualidad es de uno por cada mil cien pacientes.

“Este es un dato bastante grande porque es una población importante la que lo padece. Además, la tecnología actual, los instrumentos que tenemos actualmente, como por ejemplo el topógrafo, nos permiten identificar con mayor precisión esta condición. Anteriormente no era tan fácilmente detectable en etapas incipientes porque se confunden con un simple miopía y astigmatismo y en etapas incipientes en etapas tempranas. Pero ahora los podemos detectar desde que está empezando. Prácticamente al poco tiempo de que inicia”, explicó el doctor Luis Barba.

La deformación de la córnea en forma de cono tiene como consecuencia una alteración en la visión que inicia principalmente en la adolescencia y que se caracteriza por ser binocular, crónica y evolutiva, además de que se divide en cuatro etapas.

“En la etapa inicial, el paciente tiene una visión borrosa y en muchos casos puede ser corregida con anteojos. Posteriormente la etapa dos, la cual necesariamente o casi en la mayoría, ya necesitan lentes de contacto para poder ver bien. Y las etapas tres y cuatro su visión obviamente está muy deteriorada y tienen que necesariamente usar lentes de contacto. El desenlace final de un paciente que evoluciona el queratocono culmina con un trasplante de córnea. Esto es, se retira un botón, el botón de la córnea y se coloca una córnea de un donante”, acentuó el doctor Luis Barba.

Para concluir, el doctor Luis Fernando Barba Gallardo exhortó a la población, principalmente a los adolescentes, que presentan visión borrosa a causa del queratocono a que acudan con los especialistas para que les realicen la tomografía corneal y tengan un tratamiento adecuado.

Por: UAA/Jorge Valencia.