Rusia. 

Rusia anunció hoy los planes de construir una nueva estación orbital (ROSS), después de renunciar a la Estación Espacial Internacional (EEI) debido a las sanciones occidentales por la campaña militar rusa en Ucrania.

El Consejo Supervisor de Roscosmos dio luz verde al proyecto de construcción de los módulos de la estación, tras aprobar el diseño preliminar de la ROSS, según informó la agencia espacial rusa en un comunicado.

La decisión se tomó tras escuchar los informes sobre la marcha de la construcción del Centro Nacional Espacial en Moscú y las perspectivas de la actual plataforma orbital, en funcionamiento desde 1998.

El jefe de Roscosmos, Dmitri Rogozin, destacó que la estación ROSS es el futuro de la cosmonáutica tripulada rusa y de la exploración rusa de la Luna.

Como la órbita de la estación tendrá una orientación de 97-98 grados y un mayor nivel de radiación, ROSS no estará habitada de manera permanente.

Rogozin no descartó que los módulos del segmento ruso de la EEI se utilicen en la construcción de la nueva plataforma orbital.

En principio, la estación ROSS tendrá seis módulos, donde trabajarán un máximo de cuatro inquilinos, habrá dos viajes tripulados y tres de carga al año.

El 2 de abril Rogozin anunció su decisión de retirarse de la EEI, símbolo de la cooperación espacial durante más de dos décadas.

Roscosmos, que también comunicó hoy que proyectará sin la agencia estadounidense NASA la sonda Venus-D, había puesto como condición a sus socios el levantamiento de las sanciones por la «operación militar especial» en Ucrania antes del 31 de marzo, lo que no ocurrió.

Hasta ahora, Moscú barajaba seguir participando en la EEI hasta 2024 e incluso 2030, en caso de que la plataforma resistiera el paso del tiempo.