Jalisco, México.
“Yo no trabajaba, no actuaba. Yo vivía los papeles”, compartió Elsa Aguirre, actriz célebre de la Época de oro del Cine Mexicano. Bastaba con que el director de cada filme le diera el guion para que Aguirre lo aprendiera y llevara a la pantalla grande.
“A mi me explicaba el director y yo creaba el personaje, lo interpretaba como yo lo vivía”, dijo la actriz a sus 91 años de edad.
No importaba el papel, Aguirre lo vivía como propio. “Yo creo que se me dio la profesión que yo necesitaba”, mencionó luego de contar cómo fue su acercamiento con el cine: “El destino me llevó, yo no puse nada, comencé a descubrir los papeles y me empecé a desenvolver como que, si yo ya conociera todo, todos los papeles que hice”.
Esa seguridad, le permitió desarrollar (y vivir) papeles sobre situaciones a las que jamás se había enfrentado. Desde subirse a un caballo sin saber montar y tomándolo a pelo, hasta descubrir los besos y el amor a través de sus personajes.
¿Cómo lo hacía? Diciéndose a sí misma: “yo puedo”. Estas y otras anécdotas sobre su vida, platicó Aguirre en una conversación con Silvestre López-Portillo, luego de haber sido homenajeada con el Mayahuel de Plata este año en el Festival Internacional de Cine en Guadalajara (FICG).
Con todo y su innegable belleza y talento innato de vivir a través del cine, Aguirre compartió que no estaba en su mente ser artista, ni famosa, ni de dinero: “Lo que mi yo interno quería era la palabra libertad”. En la búsqueda de sentirse libre, la actriz destacó que todo lo que empezó a vivir “fue porque quería ser una mujer que tuviera su postura en la vida”.
“Todo lo que hice y he vivido me gustó y no me arrepiento”, manifestó la actriz. “Todo lo que me ha pasado ha sido positivo para mí porque me ha dado conocimiento de mí misma”.
Aunque reconoció que hubo dos situaciones que le hubiese gustado vivir. La primera, haber trabajado con el célebre director de cine Luis Buñuel. A quien rechazó sin saberlo. Cuando Buñuel fue a casa de Aguirre buscándola, no se le recibió porque en ese entonces, ni ella ni sus padres sabían quién era. “Son oportunidades de la vida que se fueron”, confesó con su natural sonrisa la actriz.
La segunda, es no haber trabajado en lugar de Dolores del Río con María Félix en La Cucaracha, filme de 1959 que pudo haber sido “la oportunidad de que (Félix) viera que somos diferentes”. “Yo admiré a María porque es una personalidad, yo qué iba a pensar en parecerme a ella ni mucho menos”, expuso.
El espíritu libre y joven de Aguirre continúa en ella y en su idiosincrasia. La actriz, recién cumplidos los 91 años de edad, sostuvo que “el arte está en todo, en la vida misma”.
Y que es a través del arte que se “cambia al mundo en todos los aspectos, todo lo que nos lleve a sabernos, a preguntarnos más, el artista tiene esa misión”.
La conversación está disponible en YouTube y puede verse en: https://www.youtube.com/watch?v=sqMzEg_-Bm0
Además de haber sido reconocida con el Mayahuel de Plata y de la charla con López Portillo, la vida de Elsa Aguirre fue homenajeada en la edición 36 del FICG a través del libro “Elsa Aguirre, la mujer que yo amé”, del productor e investigador Roberto Fiesco y el ilustrador Alejandro Magallanes.
Por: Dora Solís / NCC Iberoamérica.
- Plumas NCC | Código de Buenas Prácticas de IA - noviembre 26, 2024
- Líder indígena, Huni Kuin, ONU,biopiratería, Australia, edad mínima, redes sociales - noviembre 25, 2024
- NCC Radio Ciencia – Emisión 286 – 25/11/2024 al 01/12/2024 – Encuentran altos niveles de metales pesados en aves marinas de Galápagos - noviembre 25, 2024