Brasil

Suspendida en un andamio a treinta metros del suelo, la mexicana Paola Delfín da las últimas pinceladas con brocha al grafiti gigante que empezó a pintar en el barrio Pinheiros de Sao Paulo, Brasil.

Es el rostro de una mujer en diferentes tonos de gris e integra un conjunto de doce murales que está pintando junto a otros 14 artistas, que cubrirán por completo las fachadas laterales de varios edificios de la región, explica la artista.

En plena pandemia del coronavirus en Brasil y con los museos todavía cerrados, la megalópolis refuerza aún más su fama de epicentro mundial del arte urbano. Este proyecto formará el conjunto de grafitis más grande del país, con 3 mil 700 metros cuadrados pintados en total.

El «Festival NaLata», se trataría de un evento que reuniría a muchos otros artistas y obras, pero la pandemia obligó a los organizadores a cancelar gran parte de las actividades.

«Decidimos mantener solo a los artistas que ya se encuentran en Sao Paulo. Y en el caso de los murales, son obras que pueden ser vistas por todos desde la calle, es algo democrático y no trae riesgos de aglomeración», explica Luan Cardoso, curador del festival. Para pintar las fachadas, fue necesario pedir autorización a cada uno de los habitantes de los edificios.

Por: AFP