Bolivia.

Recurriendo a la llama, un animal andino apreciado por su carne y su lana, el estadounidense Derren Patterson, desarrolló en Bolivia una singular oferta de turismo virtual que genera ingresos en medio de la paralización por el coronavirus.

“Call a llama “ o “Llama a una llama” es una iniciativa que pone a los turistas en contacto con tres destinos rurales a través de videoconferencia y les da oportunidad de interactuar con sus habitantes, particularmente con los criadores de llamas.

El servicio está disponible para todas las personas, familias, grupos grandes, medianos y pequeños, así como negocios corporativos. Se establece un horario definido para la conexión por videollamada, que se prolonga entre 15 a 20 minutos.

Una vez que los interesados hayan elegido una fecha y el destino de su interés. El costo del servicio es 50 dólares para los grupos reducidos y de 100 dólares en el caso de los negocios corporativos, a los que no limita el número de personas conectadas.

Por: AFP.