Perú.

Un estudio acaba de revelar que los miembros de la sociedad Caral fueron durante un tiempo refugiados climáticos, que plasmaron en su arte y rituales el trauma de abandonar sus ciudades debido a la falta de agua. Los detalles de esta investigación sobre una civilización considerada la más antigua de Latinoamérica.  “El cambio climático es un proceso, empezaron con sequías pero sobre todo fueron primero deshielos”, contó la arqueóloga Ruth Shady.

La arqueóloga detalló que las tierras se volvieron arenales. Los ríos se secaron y no había producción agrícola, por lo que la gente no tenía de qué vivir. Ante esta situación, migraron hacia el valle de Huaura y fundaron Vichama, donde los arqueólogos han descubierto murales tallados en las paredes con gente muerta y jóvenes en danzas rituales para poder sobrevivir. Esto es lo que los expertos interpretan como el periodo en el que sus ancestros vivieron ante las caces.

“Se dio la migración de transversal, de sierra, de selva en busca de alimentos y fueron abandonados los centros que ellos ocupaban, los centros urbanos. Eso mismo en la época que ocurrió en nuestro país, en Caral, que se ve reflejado, ocurrió en Egipto, en Mesopotamia, en la India, en China”, destacó Shady.

Entre los descubrimientos se han hallado también relieves murales, representaciones a las que se le denominaron la danza de la muerte y de la vida. También se observan seres muertos aparentemente adultos con las costillas expuestas y los ojos cerrados. (EFE)