En un taller de la ciudad de Jaipur (India) más de 150 personas trabajan en la producción de piedras preciosas con cristales de cuarzo de color violeta y amarillo. Todos los bordes de las piedras deben de ser pulidos con mucho cuidado; cada imperfección, cada desnivel reduce la calidad de la piedra. Algo que la pequeña empresa hindú no puede permitir, a pesar del aumento de los pedidos. La mayoría de las piedras preciosas van hacia...